La captación de talento millennial requiere cuidar la experiencia de candidato lo que potencia significativamente las solicitudes de los jóvenes, además de ayudar a tu empresa a reforzar su imagen y contar con un equipo de colaboradores más felices.

Dar una definición de quiénes son los millennials no es tarea fácil, pero muchos medios coinciden en:

Jóvenes nacidos desde 1980 hasta el 2000, nativos digitales e hiperconectados, son exigentes, están informados, tienen conciencia social y en lo referente al trabajo esperan relaciones cercanas y una retroalimentación frecuente por parte de sus superiores.

 

Los millennials y el trabajo

 

Según datos de la fundación telefónica, los millennials europeos buscan cuatro cosas en las empresas y por este orden:

1.- Conciliación personal y laboral

2.- Diversión

3.- Formación y Remuneración. (Estas dos últimas con el mismo porcentaje)

 

La estabilidad y una buena remuneración la establecen como un objetivo a 10 añosy es que, a diferencia de las generaciones anteriores, los millennials buscan “riqueza” definida como experiencia y no dinero.

Quieren trabajar en empresas que les permita priorizar las buenas relaciones y un entorno de trabajo agradable antes que el éxito a cualquier precio, son seguros de sí mismos y les interesa crecer y seguir aprendiendo.

 

Mejorar la experiencia del candidato millennial en la captación de talento

 

La experiencia del candidato es la trayectoria que recorre desde que encuentra nuestra oferta de trabajo hasta que se incorpora a la empresa.

 

La importancia de cuidar el proceso de captación:

 

Hoy en día la especial situación del mercado laboral hace que cuidar el proceso de selección y captación de talento nos permita obtener un plus de éxito empresarial, las personas hacen las empresas y los millennials poseen unas competencias especialmente valiosas.

Estas son algunas de las cuestiones que demuestran esa importancia:

1.- A pesar de que hay una alta demanda de empleo no es fácil encontrar las competencias necesarias para nuestra empresa, competencias que no siempre se obtienen a través de la formación recibida en centros educativos y universidades.

2.- Un candidato indeciso entre dos ofertas de empleo se decantará por aquella empresa que le proporcione una mejor experiencia en el proceso de selección.

3.- Teniendo en cuenta las características especiales de esta generación debemos cuidarnos de las opiniones negativas hacia nuestra empresa como empleadora. La tendencia a compartir opiniones en las redes se incrementa en caso de que éstas sean negativas.

4.- Los millennials necesitan transparencia e información precisa acerca del puesto y las condiciones.

 

Fases del proceso de selección

 

El proceso de selección comienza aún antes de redactar nuestra oferta y no termina hasta la incorporación del candidato al puesto ofertado.

 

Redactar la oferta de empleo

 

Es la primera fase del proceso, la relación con nuestros candidatos comienza en este momento y no cuando seleccionamos las candidaturas presentadas.

No debemos olvidar las especiales características de estos candidatos, nuestro objetivo será evitar que se sientan frustrados después de su primera entrevista por entender que la oferta no se corresponde con la realidad. Ser transparentes, informar de las fases del proceso y respetar nuestra identidad corporativafacilitarán ganarnos la confianza en un primer contacto.

El 80% de los jóvenes lo primero que hace al valorar una oferta es buscar información en las redes y en internet, por tanto nuestra imagen como empleador debe ser cuidada y atractiva, estos dos consejos nos ayudarán a conseguirlo:

1.- Disponer de una información online actualizada y accesibe, acercando al candidato a la empresa.

2.- Crear contenido que se sea de interés. El formato vídeo es muy atractivo para los jóvenes y compartir testimonios de otros colaboradores e imágenes que muestren nuestras actividades crean cercanía y confianza además de ayudar a proyectar su participación en nuestro equipo. 

 

Selección

 

En esta segunda fase, después de la inscripción de los candidatos en nuestra oferta de empleo, toca seleccionar y apostar por aquellos jóvenes talentos que formarán parte de nuestro equipoy contribuirán a lograr futuros éxitos.

Este tipo de candidatos gestionan sus ofertas de trabajo mayoritariamente a través del móvil, usemos esta característica a nuestro favor y propiciemos una comunicación fluida en la que podemos ir informando del estado de su candidatura, como por ejemplo:

Fecha de su siguiente entrevista, aplazamiento de la que ya tenemos concertada, aclaración de dudas, solicitud de documentación, etc.

La comunicación transparente con la persona que será su supervisor ayuda al compromiso y, una vez más, a visualizar su futura pertenencia a la empresa, incluso a comunicarnos su desistimiento si es el caso y no hacernos perder el tiempo.

No perdamos de vista que el candidato también evalúa a la empresa,cuidemos los detalles:

-Recibirlos puntualmente, en un lugar adecuado.

-Hablarle de la cultura de la empresa y sobre el equipo con el que colaboraría, incluso una visita a nuestras instalaciones, ofrecer un café o un vaso de agua ayuda a crear un ambiente relajado en que fluya la comunicación.

-No olvidemos que los millennials se preocupan por la flexibilidad, las oportunidades y la formación, no dejes de hablar sobre ello.

-Escucha sus preocupaciones y responde sus preguntas o dudas de la forma más transparente posible, ser prudente a la hora de vender el puesto ahorrará seguir con un proceso que puede no acabar con éxito.  

-No finalices la entrevista sin informarle del siguiente paso, ¿Va a haber una segunda entrevista? ¿Cómo le informaremos del resultado? ¿Dónde puede dirigirse para aclarar sus dudas?

 

Responder al candidato

 

Llegados a este punto tendremos que dar respuestas negativas y positivas. En nuestras manos estará convertir las respuestas negativas en constructivas, seguir cuidando la imagen de nuestra empresa y que todos los inscritos en la oferta puedan valorar su experiencia con nosotros como positiva.

Las respuestas negativasdeben cumplir con una serie de premisas:

  • Informar rápidamente, no estamos hablando de que salga por la puerta y le comuniquemos a los cinco minutos que no es nuestro elegido, pero no esperar al final del proceso que puede durar incluso semanas para comunicar nuestra decisión.
  • Si es posible darle algún consejo para mejorar, ¿qué es lo que ha influido en nuestra decisión?, este tipo de candidatos agradecen la oportunidad de poder mejorar y aprender para futuros procesos de selección.
  • Pedir también que valore nuestra empresa y el proceso de selección, qué le ha gustado o qué le ha disgustado de nuestro proceso, cómo podemos mejorar para ofrecer una mejor experiencia. Qué opinión se lleva de nuestra empresa y si considera que somos un buen lugar donde trabajar y crecer.

 

En cuanto a las respuestas positivas, sigue siendo importante la rapidez de comunicación de la decisión, aunque hay que tener en cuenta que lo normal es que nuestro candidato elegido esté en otros procesos de selección y necesite un tiempo para pensar su decisión.

No olvidemos que nuestro candidato será un recién licenciado o incluso aún estará estudiando, hay que dejarle un margen de tiempo para que se lo piense e incluso que lo hable en su entorno, nos encontramos ante un posible primer empleo que puede influir significativamente en su trayectoria profesional, la presión no suma en estos casos.

A partir del momento en el que nos comunica su aceptación del puesto debemos seguir acompañándolo en su proceso de incorporación:

-Indiquemos claramente las fechas previstas para cada trámite y la del inicio de la colaboración.

-Facilitarle los trámites administrativos.

-Invitarlo a la siguiente sesión formativa o a una reunión informal después del trabajo propiciará su integración y percepción de sí mismo como parte del equipo.

 

Hacer que se queden

 

Ahora comenzará otro reto diferente para nuestra empresa: retener ese talento y éstos son los principales factores que motivan y retienen a los millennials:

  • Formación y aprendizaje continuo
  • Buen ambiente laboral
  • Sentirse valorados y escuchados
  • Planes de carrera con posibilidad de ascensos
  • Conciliación de la vida familiar y laboral
  • Salario emocional

¿Crees que tu empresa cumple estos requisitos? De nada sirve si no lo comunicas convenientemente, haz saber a tus posibles colaboradores que podrán gozar de todas estas ventajas si forman parte de tu proyecto.